Desde la Asociación de Arqueólogos Profesionales de la República Argentina expresamos nuestra extrema preocupación por la intención del Gobierno Nacional de desmantelar del Sistema Universitario Nacional y el Sistema de Salud Pública a través de desfinanciarlos.
Estos últimos días asistimos al intento de cierre del Hospital Nacional en Red “Lic. Laura Bonaparte”, especializado en salud mental, y la intervención sobre las finanzas del Hospital Garrahan, que atiende a niños y niñas de todo el país con cuadros complejos de salud. Ambos cumplen una tarea esencial para los sectores desfavorecidos y para la sociedad en su conjunto.
Además, la búsqueda de malograr la Salud Pública también incluye salarios de pobreza a sus trabajadores, que ya lamenta el éxodo del personal más especializado.
Por cierto, el método es similar al que el Gobierno aplica en las Universidades Nacionales e instituciones de Ciencia y Técnica: las partidas presupuestarias a la baja y los sueldos bajos obligan a buscar empleo en el sector privado a quienes llevan adelante con orgullo y dedicación la Educación Superior de gestión estatal. Así, el sistema público pierde a los docentes con mayores años de estudio y preparación.
Lo que es peor, el veto presidencial a la Ley de Financiamiento Universitario y la no insistencia de la ley en el Congreso Nacional dejan en una situación grave a las instituciones y a sus trabajadores: los salarios de docentes, administrativos, personal de mantenimiento y autoridades no acompañan la inflación que se registra desde diciembre de 2023.
Estas muestras de falta de sensibilidad de parte de las autoridades nacionales sobre la administración de la Salud y la Educación, que afectan de manera particular a los sectores sociales más vulnerables, representan un accionar destructivo e irrecuperable.
Por eso solicitamos al Congreso Nacional que se arbitren medidas para mejorar las partidas presupuestarias en la Ley de Presupuesto 2025 y se dispongan los medios necesarios para frenar el desmantelamiento de hospitales que son un orgullo para los argentinos.
Nuestro futuro se construye con una educación gratuita, sin restricciones, inclusiva y de calidad; y cuidados por los mejores profesionales de la Salud y en las mejores condiciones de trabajo.